Hamlet en Salzburgo
Agosto 18, 2024. La presentación de la ópera Hamlet de Ambroise Thomas en concierto en el Festival de Salzburgo fue una velada memorable llena de profundas emociones, en la que se destacaron actuaciones excepcionales de los solistas, la orquesta y el coro.
El conjunto de cantantes fue sobresaliente, desde los papeles principales hasta los más pequeños, brindando un verdadero placer para el oído y el alma. Stéphane Degout, en el rol de Hamlet, demostró un control magistral sobre los poderosos estallidos de esa parte dominante. Con una transición fluida a momentos tiernos y llenos de matices, capturó las intensas emociones del personaje con delicadeza y excelente dicción. Lisette Oropesa como Ophélie fue simplemente impresionante, con su voz llena de brillantez, belleza y habilidad técnica.
Los aspectos más destacados de la velada incluyeron ‘O vin, dissipe la tristesse’ (‘O vino, disipa la tristeza’), de Hamlet y la escena de locura de Ophélie, ‘Pâle et blond, dort sous l’eau profonde’ (‘Pálida y rubia, ella duerme bajo el agua profunda’). Ambos presentaron una culminación del arte operístico y vocal y fueron seguidos por un largo y entusiasta aplauso.
Ève-Maud Hubeaux aportó profundidad a la reina Gertrude, apoyada por una imponente presencia escénica y una conmovedora interpretación vocal de la desafortunada reina. El canto de Jean Teitgen estuvo libre de cualquier melodrama, mostrando su impresionante destreza vocal y aportando profundidad y poder al rey Claudius.
Los papeles secundarios fueron igualmente notables, con Jerzy Butryn como Polonius, Julien Henric como Laërte y Clive Bayley como el Fantasma del difunto rey, añadiendo otra capa de interpretación vocal impresionante. El dúo formado por Ilya Silchuk y Seungwoo Simon Yang como los Sepultureros mostró hermosas voces y un memorable toque de humor.
La Mozarteumorchester Salzburg, bajo la experta batuta de Bertrand de Billy, proporcionó un sonido fino, delicado y romántico con una dinámica bien equilibrada, lo que contribuyó significativamente al éxito de esta interpretación de Hamlet. De Billy es conocido por su capacidad para equilibrar la orquesta con los cantantes, respirar con ellos y garantizar que la orquesta apoye, en lugar de abrumar, sus interpretaciones vocales. Su dirección permitió que los cantantes brillaran manteniendo la integridad dinámica de la partitura orquestal. El coro de la Filarmónica de Viena contribuyó al éxito de la velada con su canto armonioso y resonante.