Festival de Pentecostés de Salzburgo — “Sonidos de La Serenísima”
Después de Roma y Sevilla en los últimos años, la directora artística Cecilia Bartoli continuará sus viajes imaginarios por ciudades europeas durante el Festival de Pentecostés de Salzburgo del 6 al 9 de junio de 2025, centrándose este año en el sonido de la ciudad de la laguna de Venecia en su programa.
En Venecia trabajaron músicos importantes desde el Renacimiento hasta la época moderna y durante mucho tiempo la ciudad de la laguna fue el centro de la industria de la impresión musical. Incluso aquí se inauguró el primer teatro de ópera del mundo, lo que consolidó la reputación de Venecia como ciudad musical de renombre mundial cuyo nombre evoca a los nombres de Giovanni Gabrieli y Claudio Monteverdi, Nicola Porpora y Johann Adolph Hasse, Gioachino Rossini y Giuseppe Verdi, Gustav Mahler y Richard Wagner, por no hablar de Luigi Nono.
En el Festival de Pentecostés de Salzburgo de 2025 se podrá escuchar una selección de música que abarca cinco siglos, con obras escritas en Venecia, creadas para Venecia o inspiradas por la ciudad lacustre. Nadie menos que Friedrich Nietzsche lo expresó a la perfección: “Cuando busco otra palabra para la música, siempre encuentro la palabra Venecia”.
El pasticcio operístico Hotel Metamorphosis, que creará Barrie Kosky con música de Antonio Vivaldi, nos llevará al siglo XVIII. Cecilia Bartoli, Varduhi Abrahamyan, Lea Desandre y Philippe Jaroussky serán los solistas y estarán acompañados por Les Musiciens du Prince – Monaco e Il Canto di Orfeo bajo la dirección de Gianluca Capuano. Angela Winkler asumirá el papel de Orfeo.
A decir de Bartoli, “antes de que se estableciera el derecho de autor como concepto legal, antes de que las partituras fueran ampliamente accesibles y mucho antes de que se inventaran los dispositivos de grabación, la reutilización de música de diferentes compositores en nuevos contextos no se consideraba un acto ilícito de plagio, sino un cumplido. Era la única manera de preservarla, ya que de lo contrario cada pieza musical desaparecería del repertorio después de solo unas cuantas interpretaciones y no se volvería a escuchar fácilmente. Al retomar esta tradición, este proyecto servirá como un homenaje a Vivaldi, el compositor de ópera”.
Referente del siglo XVII es Vespro della Beata Vergine (1610) de Monteverdi, un hito de la música sacra. Estará acompañada por la composición Venezianischer Morgen de Bruno Mantovani (1974-), basada en el poema homónimo de Rainer Maria Rilke de 1908, que se estrenará mundialmente solo unas semanas antes de las funciones de Salzburgo.
Bartoli ha programado La traviata de Giuseppe Verdi, estrenada en el Teatro La Fenice de Venecia en 1853, como un concierto con un elenco de fantásticos solistas, que representan la música creada en o para Venecia a lo largo del siglo XIX. Nadine Sierra, Piotr Beczała y Luca Salsi interpretarán los papeles principales en esta función en concierto que se celebrará el domingo de Pentecostés.
También se presentará una matiné de música de cámara concebida por el pianista y director artístico del Festival de Salzburgo Markus Hinterhäuser, que incluirá los Wesendonck Lieder de Wagner, así como …sofferte onde serene… de Luigi Nono, una composición para piano y cinta grabada inspirada en Venecia, la ciudad natal de Nono. Obras de estos compositores, así como de Alban Berg y Salvatore Sciarrino, serán interpretadas por Hinterhäuser y por el barítono Matthias Goerne durante la matiné del lunes de Pentecostés.
Durante 50 años, John Neumeier fue sinónimo del Ballet de Hamburgo: una simbiosis artística tan estrecha que la compañía lleva incluso su nombre. Durante este tiempo, los bailarines de Neumeier actuaron seis veces en Venecia; en el Teatro La Fenice, por supuesto, pero también en la Piazza San Marco. El coreógrafo vuelve a poner en escena su ballet Muerte en Venecia en el marco de una amplia retrospectiva que marca el final de su carrera como director artístico. Su interpretación se centra en la figura del maestro coreógrafo Gustav von Aschenbach. El pianista David Fray interpretará parte de la música de acompañamiento. En esta adaptación de la novela de Thomas Mann, que alcanzó fama mundial gracias a la película de 1971 de Luchino Visconti, Neumeier recurre a la música de Bach y Wagner para construir los puentes entre épocas y formas artísticas que son tan característicos de su obra.
El lunes de Pentecostés se dedicará un segundo pasticcio variado a Rossini, cuyas primeras óperas se estrenaron en Venecia, reuniendo los números más bellos de La scala di seta, L’italiana in Algeri, Tancredi y Semiramide. El lunes de Pentecostés, Cecilia Bartoli, Mélissa Petit, John Osborn e Ildebrando D’Arcangelo cantarán arias y conjuntos de sus óperas venecianas, junto con el Choeur de l’Opéra de Monte-Carlo y Les Musiciens du Prince – Monaco, todos bajo la dirección de Gianluca Capuano.
Más información: https://www.salzburgerfestspiele.at/en/