Lucia di Lammermoor en Las Palmas

Mayo 27, 2023. El Teatro Pérez Galdós vivió una noche histórica tras la tercera y última representación de Lucia di Lammermoor de Gaetano Donizetti, cuarto título de una exitosa 56ª temporada de ópera donde extraordinarias voces solistas fueron las grandes protagonistas.

Los Amigos Canarios de la Ópera quisieron dedicar a la figura de Guillermo García-Alcalde —periodista, crítico musical, compositor y un gran entendido de la ópera y de la música en general— las tres funciones de una de las obras más importantes de Donizetti, estrenada en Las Palmas en 1969 con un reparto de lujo encabezado por las voces de Alfredo Kraus, Giuseppe Taddei y Elsa Saque. Socio durante años de ACO, García-Alcalde era el Marcel Prawy de Canarias, un Hombre de Ópera en una tierra que ha dado y sigue dando excelentes voces.

La obra cumbre del bel canto italiano llegó a la capital grancanaria por novena vez, de la mano de un reparto vocal de auténtico lujo, encabezado por la soprano australiana Jessica Pratt —la mejor Lucia de los últimos años— y la gran sensación de la temporada en España: el joven tenor guipuzcoano Xabier Anduaga, que debutó el rol de Edgardo, tras su reciente triunfo en el Metropolitan Opera de Nueva York.

La nueva producción de ACO con escenografía de Carmen Castañón y dirección escénica de Bruno Berger-Gorski —ambos debutantes en Las Palmas— personalmente me encantó por su clasicismo y sencillez, logrando una fiel recreación del ambiente escocés de principios del siglo XVII, con la ayuda de proyecciones.

La dirección musical corrió a cargo de la joven batuta del maestro Lorenzo Passerini quien, concentrado durante toda la velada en la búsqueda del lucimiento y la brillantez de las voces, consiguió desde el foso una magnífica aportación por parte del Coro del Festival de Ópera, en colaboración con su directora Olga Santana. Su excelente trabajo con la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, a la que supo extraer el sonido más belcantista, fue tremendamente valorada por un público entendido, que supo apreciar una dirección llena de intensidad que siempre manejó el tempi adecuado. A destacar, las aportaciones individuales de la arpista Catrin Williams y de la flautista Valerie Gelines, muy aplaudidas cuando el director las invitó a saludar.

El joven tenor Gabriel Álvarez, gran especialista en segundos roles, fue un Normanno muy convincente en lo vocal, aunque debería pulir ciertos aspectos escénicos para seguir avanzando en una carrera que puede ser muy prometedora. Su voz es cálida y goza de un bello timbre, por lo que esperamos escuchar a este joven cantante de Telde en roles mucho más importantes en un futuro próximo.

La soprano de Las Palmas Rosa Pérez, con una brillante carrera internacional a sus espaldas, realizó un notable debut en la Temporada de ACO, donde cantó por primera vez con mucha solvencia, el papel de Alisa. Habrá que verla en otras producciones con personajes de mayor peso vocal. El tenor tinerfeño David Barrera fue el encargado de interpretar el personaje de Arturo. Interesante a nivel vocal en el aria de presentación ‘Per poco fra le tenebre’, brilló en el sexteto junto al resto del elenco protagonista y al magnífico Coro de la Ópera de Las Palmas, ofreciendo uno de los momentos más sublimes de la noche.

El bajo italiano Mirco Palazzi, mostró algunos problemas vocales durante toda la noche, afrontando con profesionalismo y coraje el difícil rol de Raimondo. Su buen hacer y su complicidad con la soprano Jessica Pratt quedaron reflejados en el dúo ‘Ah, cedi, cedi’, muy aplaudido por los asistentes. El joven barítono coreano Youngjun Park, que hizo su debut grancanario con el personaje de Enrico, impactó con una voz de muchos decibelios desde su intervención inicial en el primer acto. Imponente en el aria ‘Cruda funesta smania’ y en la posterior cabaletta , plena en volumen y contundente en las notas altas, sorprendió a todo el teatro con una voz muy bien proyectada. Cantante dotado de un timbre atractivo, sus intervenciones fueron muy aplaudidas durante toda la representación, destacando el dueto con la soprano ‘Appressati, Lucia’ y su intervención posterior junto al tenor en la conocida ‘Orrida è questa notte’, tremendamente ovacionada por los espectadores.

De histórico podemos considerar el impresionante debut del joven tenor Xabier Anduaga en el rol de Edgardo. Dotado de una voz privilegiada y fuera de lo común, apreciamos un timbre bellísimo y una contundencia en el agudo pocas veces antes vista. Con una entrega encomiable durante toda la noche, en la que siempre cantó a plena voz, entusiasmó en el dúo con la soprano ‘Verrano a te’. Anduaga, poseedor de una de las voces más bonitas desde Luciano Pavarotti, es un artista al que he podido escuchar varias veces esta temporada, pudiendo afirmar que en mis 30 años de espectador, jamás presencié una evolución tan meteórica como la del cantante donostiarra: de su Arturo en I puritani de Bellini en Bilbao el pasado mes de octubre a su Edgardo en Las Palmas, hemos podido asistir a la consolidación de una de las mejores voces lírico-ligeras de los últimos años. 

Para enmarcar, el pasaje del cementerio donde afrontó el recitativo de forma espectacular, ofreciendo una lección de bel canto en el aria ‘Fra poco a me ricovero’, toda una exhibición de canto legato. La posterior ‘Tu che a Dio spiegasti l’ali’ quedará para siempre en la memoria de los privilegiados que pudimos vivir cómo el cantante de Donostia paró el tiempo en Canarias, surgiendo el duende con una gran musicalidad, un extraordinario fiato y una seguridad en las notas altas que hicieron las delicias del público, provocando desde el cielo canario el aplauso del gran Alfredo Kraus. Por fin, tras más de cien años de espera, el gran tenor de Vizcaya Florencio Constantino (1869-1919) tiene sucesor.

Por su parte, la soprano australiana Jessica Pratt, posiblemente la Lucia más importante de los últimos años, maravilló con una particular versión del personaje principal, tantas veces interpretado con éxito en los últimos años. Espectacular en la franja aguda, deleitó con sus pianissimi en el aria ‘Regnava nel silenzio’, vitoreada por todo el teatro. Brillante en todos los duetos, su voz se impuso junto a la del tenor en el sexteto ‘Chi mi frena in tal momento?’, culminado con una nota final eterna que llegó a todos los rincones del teatro. Es difícil encontrar las palabras adecuadas para calificar la espectacular escena de la locura con la que nos enamoró, ya que fue precedida de un momento tremendamente emocionante cuando, antes de iniciarse el acto, se comunicó a los espectadores por medio del supertitulaje que el equipo de fútbol de la UD Las Palmas acababa de ascender a Primera División. 

Con la gente enfervorizada y totalmente entregada, Jessica Pratt, la auténtica sucesora de la gran Joan Sutherland, ofreció una clase magistral en la ejecución de las coloraturas cuando afrontó ‘Il dolce suono… Ardon gl’incensi’. Impecable técnicamente y tremendamente convincente como actriz, regaló un bis histórico que permanecerá para siempre en la memoria de los asistentes y que logró transportar al que escribe estas líneas a los tiempos vieneses en los que disfrutaba de la maravillosa Edita Gruberova.