Alberto Robert: “A mí lo que me gusta es simplemente cantar”

Ha sido muy grato charlar con el joven cantante Alberto Robert, originario de Celaya, Guanajuato. Con tesitura de tenor ligero, este joven artista posee un registro impresionante, timbre de gratos colores y cuidada musicalidad, virtudes que le han permitido ir ascendiendo en el difícil mundo de la ópera. 

Este tenor de apenas 20 años ha ganado el Primer Lugar en el Concurso de Ópera del Conservatorio Superior de Música y Artes “Carlos Díaz Du-Pond” de su ciudad natal, fue invitado especial en el Concurso de la Ópera de San Miguel en 2020, ganó el Segundo Premio Masculino en el 5º Concurso Internacional de Canto Linus Lerner, así como premios de estímulo en las audiciones del Metropolitan Opera en San Miguel. 

Su debut operístico fue el rol de Don Ottavio en Don Giovanni de Mozart, con el Mexico Opera Studio (MOS) en Monterrey. En diciembre del año pasado participó en la Gala del Décimo Aniversario del Teatro del Bicentenario en León, mientras que el pasado mes de abril cantó como cover el rol de Don Ramiro de La Cenerentola de Rossini en el Festival de Ópera de Las Palmas de Gran Canaria, España; y este verano participó en el taller de ópera de la Accademia Rossiniana en Pesaro, donde cantó los roles del Chevalier Belfiore y Don Luigino, respectivamente, en dos funciones de Il viaggio a Reims durante el pasado Festival Rossini.

Muchos cantantes iniciaron su carrera musical inspirados por algunos cantantes. ¿Fue tu caso? ¿Cómo nació tu pasión por el canto?
¡Desde luego! Mi gusto por el canto inició gracias a que de niño escuchaba cantar a José José. Desde entonces cantaba la música que él interpretaba y supe que quería ser un gran cantante al igual que el príncipe de la canción. Aunque mi acercamiento a la ópera surgió gracias a que en la televisión vi un video de ’Los 3 Tenores’ (Pavarotti, Carreras y Domingo) cantando ‘O sole mio’, y me enamoré totalmente de la manera de cantar este tipo de música y, sabiendo el reto que implicaba, decidí que yo también quería cantar de esa manera.

¿Podrías platicarnos de tu preparación musical?
Realmente mi preparación en la música es todo un viaje, ya que siempre he tenido la idea de que se aprende de muchos lugares. El primer lugar donde conocí la música como un estudio fue en el Coro Monumental de Celaya, un pequeño coro de niños y adolescentes al que tuve la oportunidad de entrar a los siete años de edad. Luego, estudié tres años en el Conservatorio de Música y Artes de Celaya, donde adquirí herramientas como el solfeo, la armonía, entrenamiento auditivo, historia del arte y de la música, hasta poder cantar en el Coro Juvenil del Conservatorio. 

Aunque tuve algunos maestros de canto como Amelia Sierra, Jesús Palato y Zaira Soria, mi mayor avance fue teórico, como en las materias mencionadas. Fue hasta que conocí al maestro Andrés Sarre que personalmente sentí un avance notable, además de tomar la ópera como un único objetivo, ya que antes también cantaba música popular. Gracias al maestro Sarre tuve la oportunidad de ser escuchado y trabajar con distintos maestros como Alejandro Miyaki, el tenor Armando Mora, el barítono Carlos Conde y el tenor Joseph McClain, entre otros.

Tu voz parece que nació para la tradición del bel canto, de compositores como Rossini, Donizetti y Bellini. ¿Qué opinas al respecto?
Opino que para los diversos compositores de la ópera se tiene que trabajar y estudiar mucho para interpretarlos en el estilo adecuado de su época. Personalmente me siento muy contento de poder interpretar la música de los grandes compositores belcantistas, ya que realmente disfruto mucho cantar sus obras y espero seguirlas cantando por muchos años más.

¿Cómo llegaste al Rossini Opera Festival y cómo fue tu experiencia de cantar el rol de Belfiore en Il viaggio a Reims?
Fue toda una aventura puesto que, gracias a mi agente José Velasco, conocí a Rubén Sánchez Vieco, quien es el coordinador de pianistas de la Accademia Rossiniana “Alberto Zedda”, quien me escuchó en línea y le habló de mí al director artístico del Festival Rossini, el tenor Ernesto Palacio, quien desde un principio mostró interés en mí, preparándome la ópera La Cenerentola de Rossini y haciéndome una audición para la Accademia, donde fui aceptado.

Mi participación como Belfiore en Il viaggio a Reims fue muy gratificante y de mucho aprendizaje, además de ser una experiencia formidable. Llevaré esta ópera siempre en mi memoria, ya que fue mi debut en Italia.

¿Cómo fue tu experiencia de trabajar con el maestro Palacio?
Sin lugar a dudas fue algo que siempre llevaré conmigo ya que es un maestro muy exigente y que siempre busca sacar la mejor parte artística y musical del alumno. Además, es una gran persona y un excelente guía con mucha experiencia que me dio consejos invaluables para mi carrera en la ópera.

¿Qué otros roles belcantistas te gustaría interpretar en el futuro?
Me gustaría cantar muchas óperas de Rossini, tanto las conocidas como las no tan conocidas. Me gustaría cantar un poco más de Mozart y empezar a poner roles completos de Donizetti como Ernesto de Don Pasquale. 

Aunque a mí lo que me gusta es simplemente cantar y seré paciente y comprensivo con mi voz, de cómo vaya evolucionando y madurando con el tiempo, eso también dirá qué repertorio debo cantar.

¿Cuál es tu postura ante los montajes vanguardistas?
Siempre he pensado que hay un público para todo y eso incluye también los montajes vanguardistas. Personalmente me encanta ver siempre nuevas maneras de contar una historia. Es como ver la misma película, pero con distintos actores y escenografías. 

¿Cuáles son tus óperas favoritas?
Tengo un gran gusto por óperas como La Bohème y Turandot de Puccini, Così fan tutte y Don Giovanni de Mozart. Pero en especial me gusta mucho escuchar y cantar La Cenerentola de Rossini. Esa ópera ocupa un lugar muy especial en mí y espero poder cantarla muchas veces.

¿Admiras en especial a algunos cantantes actuales o del pasado?
Admiro en especial al tenor Franco Corelli. Es mi tenor favorito y me hubiera gustado mucho poder escucharlo en persona, al igual que a Luciano Pavarotti. También tengo una gran admiración a los tenores Juan Diego Flórez y Javier Camarena, sobre todo porque cantan el mismo repertorio que yo. También me gusta escuchar de vez en cuando a los barítonos Peter Mattei y Dmitri Hvorostovsky, a la soprano María Callas y por supuesto a Anna Netrebko.

¿En tu opinión, la ópera es vista de forma distinta en Italia que en México?
Supongo que en todas partes del mundo los amantes de la ópera van a las funciones con una gran expectativa hacia los cantantes, la puesta en escena, la orquesta, el director, etcétera. Solo que en Italia están acostumbrados a un gran nivel. Algo que puedo añadir es que para la ópera tienen gustos más tradicionales, aunque no están cerrados a las puestas en escena vanguardistas. Mi punto de vista del público italiano es que, si haces un buen trabajo, lo harán notar… y también lo contrario.

Como cantante joven ¿cuáles retos encuentras en este momento de tu carrera profesional?
Yo pondría como primer punto la paciencia, porque uno como joven quiere comerse al mundo en un bocado, cuando queda un largo camino de aprendizaje y experiencias. Dependiendo de la situación económica en que uno se encuentre, también el dinero es todo un reto (al menos para mí), aunque en el camino he tenido la fortuna de conocer a personas que han creído en mí y me han apoyado en ese sentido también. 

Pero creo que el reto más grande es no desistir de nuestras metas y sueños, a pesar de las personas que no creen en nosotros, o de las personas que no están dispuestas a darle una oportunidad a un cantante joven.

¿Te gustaría cantar otros géneros vocales como el Lied, el teatro musical o la zarzuela?
Desde luego que sí, sobre todo Lied y zarzuela, ya que, además de estilo, se adquieren herramientas de interpretación y musicales que pueden enriquecer la ejecución operística.

¿Cuáles son tus planes para el futuro próximo?
Primero que nada seguir aprendiendo, aunque creo que eso nunca se deja de hacer. Pienso que, como cantante joven, uno tiene que adquirir todas las herramientas y experiencias necesarias para el desarrollo de una buena carrera. Tengo en puerta algunos conciertos dentro y fuera del país a final de año, así como para 2022 también algunas producciones de Il barbiere di Siviglia en Stuttgart, así como Così fan tutte y La Cenerentola por confirmar.