Ricardo Ceballos: “Paciencia e inteligencia para ser bajo”

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“En estos tiempos de Coronavirus, los teatros de todo el mundo se han reinventado para seguir conectando con sus audiencias, y siento que nosotros como artistas estamos obligados a apoyar esa iniciativa. Sin público, la ópera no sería sustentable; y esto podría significar perder una de las máximas formas de expresión artística creadas por el ser humano.”

La irrupción de la emergencia sanitaria mundial causada por el virus SARS CoV-2 ha impactado el quehacer cotidiano de teatros líricos y salas de concierto. Como parte de los estragos de la pandemia., un porcentaje sustantivo de las carteleras musicales se ha modificado, suspendido o reprogramado.

Ante ese escenario, de igual forma han cobrado fuerza alternativas —acaso temporales y efímeras— para mantener la actividad musical en movimiento y en contacto con el público. La virtualidad que permiten las tecnologías cibernéticas es una de ellas: las redes sociales y otras plataformas han servido para alojar y compartir videos, transmitir funciones, realizar streamings, conversatorios, conferencias y otras actividades con artistas e instituciones.

En materia vocal, han surgido también —con mayor o menor seriedad de sus organizadores y jurados; con mayores o minúsculas bolsas de premios— concursos de canto en los que cientos de cantantes jóvenes —otros, no tanto— han encontrado aparadores y formas de allegarse recursos en tiempos pandémicos.

En esa vertiente, el bajo mexicano Ricardo Ceballos de la Mora resultó ganador del Dallas Opera Guild Biennal Lone Star Vocal Competition —un certamen respaldado por Ópera de Dallas—, que originalmente se llevaría a cabo en el mes de mayo de manera presencial, pero que ante la epidemia fue celebrado online con una votación del público que cerró el pasado 7 de junio.

Días después de ese triunfo, Ricardo Ceballos conversó en exclusiva para los lectores de Pro Ópera sobre esa modalidad de concurso, sobre la importancia de ganarlo y sobre lo que representa para su carrera.   

En la entrevista que hace algunos meses te realizó nuestro editor Charles Oppenheim, concluías que comenzabas a ver los frutos de tu esfuerzo y que grandes cosas estaban por venir para tu carrera. En ese sentido, cuéntame: ¿cómo encaja en tu trayectoria este primer lugar en el Dallas Opera Guild Biennial Lone Star Vocal Competition?
Creo firmemente que el haber obtenido el primer lugar en esta competencia marcará un antes y un después en mi carrera. La Ópera de Dallas es una de las compañías más importantes, no solo en Estados Unidos, sino también a nivel mundial, y siento que esto va a repercutir muy positivamente en mi trayectoria artística.

Este certamen, sin duda, tuvo características muy particulares. En principio, porque se llevó a cabo en el transcurso de este periodo complejo generado por la pandemia de Covid-19 y porque se realizó de manera virtual. ¿Puedes hablarme sobre tu participación, la singularidad del concurso y qué significado tiene para ti esta actividad, considerando que el canto lírico en muchos lugares está en pausa?
Es la primera vez que participo en un concurso de esta índole; por votación del público. Es una experiencia totalmente distinta a los concursos convencionales. Esta vez tuve la dicha de disfrutar mi triunfo en mi país, estando en cuarentena en casa, rodeado de las personas que me quieren; lo que me llena de ánimo y energía para seguir esforzándome. Han sido meses de incertidumbre debido a la pandemia que vivimos, pero esta noticia me motiva, me hace sentirme positivo y creer que todo estará bien y que muy pronto volveremos a hacer lo que amamos. 

Sobre la dinámica del certamen en el que se eligieron 10 finalistas, el jurado que dependió de los votos del público, y el resultado (38 por ciento de un total de siete mil votos), ¿qué puedes comentarme?
Al ser finalistas, todos fuimos ganadores. Yo me siento muy honrado de compartir este espacio entre colegas con tanto talento; en una competencia tan importante y reñida. Al final tuve la fortuna de ganar por más de dos mil votos, pero no fue sino hasta el último día de la competencia que logré posicionarme en el primer lugar. 

A través de tus redes sociales animaste a tus seguidores a participar, para que te otorgaran su voto en la plataforma de The Dallas Opera (lo que igual generó que algunos medios de comunicación replicaran tu invitación para apoyarte). Luego del buen resultado, y en el contexto de virtualidad que han vivido las artes en estos días, ¿qué puedes reflexionar sobre esta interacción entre el cantante y su público, el artista y sus amistades, con miras a impulsar los logros en su carrera?
Siento que hoy en día las redes sociales son una herramienta indispensable para el artista, un espacio para compartir, crear nuevos públicos, y acercar a la gente a la ópera. Hemos visto cómo, en estos tiempos de coronavirus, los teatros de todo el mundo se han reinventado para seguir conectando con sus audiencias, y siento que nosotros como artistas estamos obligados a apoyar esa iniciativa. Sin público, la ópera no sería sustentable; y esto podría significar perder una de las máximas formas de expresión artística creadas por el ser humano.

“En este momento formo parte del Opera Studio Beckmann, Spinto Talent y próximamente me estaré incorporando al programa de jóvenes artistas de la Ópera de Kentucky, una vez que el teatro reanude sus actividades.”

Además de una bolsa de mil dólares, también conseguiste pasar a la semifinal del Dallas Opera Guild National Vocal Competition a realizarse en 2021, en la Margot and Bill Winspear Opera House, sede de la compañía. A partir de tu participación, y de certámenes anteriores en los que has estado, dime algo que podría parecer obvio, y que sin embargo no lo es del todo: ¿qué puede mostrarse como cantante en un concurso online a diferencia de presentarse en un escenario en vivo?
A diferencia de hace unos meses atrás —cuando tuve la fortuna de ganar el primer lugar distrital en Indiana y el tercer lugar en la región central en las competencias del Metropolitan Opera National Council Auditions (MONCA), y donde la presión y los nervios se viven de una manera completamente distinta— creo que uno de los puntos más importantes en esta nueva modalidad de los concursos online es el apoyo y cariño de la gente. Siendo el único mexicano en la competencia, pude ver cómo muchos de mis familiares, amigos y colegas se unieron para votar y compartir la noticia y eso es algo que me llena de gusto.

Este primer sitio viene a sumarse a un 2019 de buena cosecha para tu carrera, por actividades desarrolladas tanto en México como en Estados Unidos. Un punto de transición en este periodo fue tu integración al Opera Studio Beckmann. ¿Puedes contarme sobre este momento de tu carrera en el que —como has dicho en otras oportunidades— transitas entre ser un cantante en desarrollo a consolidarte como un cantante profesional?
Estoy muy contento con el rumbo que mi carrera está tomando y, si bien la situación de la pandemia que hemos vivido frenó muchas de mis actividades y proyectos, eso no me ha detenido y las oportunidades siguen surgiendo. En este momento formo parte del Opera Studio Beckmann, Spinto Talent y próximamente me estaré incorporando al programa de jóvenes artistas de la Ópera de Kentucky, una vez que el teatro reanude sus actividades. Esto sin duda me ayudará a seguir aprendiendo y me brindará nuevas oportunidades profesionales.

El proceso de desarrollo y de maduración de un bajo tiende a ser más tardío que el de otras tesituras. ¿Cómo has visualizado esa peculiaridad de tu instrumento, no solo en cuanto a perspectiva fisiológica, sino también en materia de repertorio y etapas de tu carrera?
Hacen falta paciencia e inteligencia para ser bajo. Así como un buen vino, nuestro instrumento requiere años de madurez para alcanzar su punto. Hasta el día de hoy hay muchos roles que por mi edad no me es posible abordar ,y probablemente cuando esté en edad para hacerlo tendré que dejar de cantar otros roles, los cuales ya no serán tan adecuados para mi voz. Muchas personas no entienden la peculiaridad de la voz del bajo y ejercen su opinión sin saber que somos el instrumento que tarda más en desarrollarse. A veces es necesario apagar el ruido de afuera y escucharte a ti mismo.

Si bien has cantado en Europa, en Estados Unidos has tenido una mayor presencia tanto en formación como en actividades profesionales. ¿Es por ahí, geográficamente, por donde piensas dirigir tu carrera o esto ha sido fruto de la casuística? ¿Cómo percibes, en tu experiencia o en la de otros, el ejercicio de una carrera en uno u otro continente
Siempre he tenido en mente el no quedarme en mi zona de confort; me gusta ponerme retos y vivir nuevas experiencias. Mi paso por Estados Unidos ha sido clave en mi carrera, pero me encantaría en un futuro cercano dar el salto a Europa. Por ahora seguiré tomando las oportunidades que se crucen en mi camino e intentando sacar el mayor provecho de cada una de ellas. Estoy muy emocionado de saber que nuevos retos se presentarán en mi trayectoria.

¿Cuáles son tus planes próximos para seguir desarrollando tu trayectoria artística?
Seguir enfocado, preparándome y trabajando en cada uno de los proyectos que surjan. Por ahora dar mi cien por ciento como parte de dos compañías tan importantes como lo son el Opera Studio Beckmann y la Kentucky Opera. Después de esto seguiré mi intuición y los consejos de las personas en quienes confío para seguir tomando las mejores decisiones en mi carrera.

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