RECOMENDACIÓN: Emöke Baráth: Voglio cantar

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Il Pomo d’Oro
Francesco Corti
ERATO CD

La soprano húngara Emöke Baráth presenta su primera grabación como solista. El título hace referencia a un aria de la compositora veneciana Barbara Strozzi (1619-1677), figura alrededor de la cual gira la temática del disco.

Strozzi fue la primera mujer compositora en la Venecia del siglo XVII que pudo tener una vida profesional en la música. Fue hija del noble, poeta, libretista y dramaturgo Giulio Strozzi, y de Isabella Garzoni, criada a su servicio. Strozzi reconoce a la pequeña Barbara (quien usaba el apellido Valle antes de ser reconocida por su padre biológico), y descubre en la niña un gran talento para la música. Es él quien la lleva a estudiar con Francesco Cavalli, a la edad de 12 años. A Strozzi le tocó vivir el primer auge de la ópera en Venecia y varias de sus composiciones están inspiradas en el estilo de Cavalli. El padre de Barbara creó la Accademia degli unisoni, una sociedad musical que se juntaba a tocar en su casa, y Barbara fungía como anfitriona de dichas reuniones.

Strozzi nunca compuso ópera, pero sus canciones y composiciones vocales tienen un sentido dramático muy cercano a los del género. Son piezas muy íntimas y evocativas, con tintes en la melodía vocal que muestran cómo Strozzi conocía bien la voz humana. Se sabe que Barbara era muy buena cantante y en su música se escucha su dominio y su amor por el arte del lucimiento de su instrumento. Sus melodías no son sencillas y muestran un verdadero conocimiento del contrapunto y la armonía. Su carrera floreció después de la muerte de su padre y de su pareja, Giovanni Paolo Vidman, un hombre casado, amigo de su padre que no obstante le dio a Barbara Strozzi cuatro hijos. La compositora murió a los 58 años en Padua, sola. 

Este disco hace homenaje también a otros compositores de su época, comenzando por su maestro, Cavalli, seguido por Biagio Marini (1594-1663), Antonio Cesti (1623-1669) y Tarquinio Merula (1595-1665). 

Baráth comienza el disco cantando el aria ‘Che si può fare’ (compuesta en 1664), mostrando una hermosa voz que se adecua muy bien al estilo de la pieza. El acompañamiento de Il Pomo d’Oro es fundamental en todas las canciones que escucharemos; el sonido de la agrupación es rico, brillante y frasea junto con Baráth, entretejiendo a la voz con el ensamble. La voz está casi al desnudo en la segunda parte de la pieza, con un acompañamiento discreto, para permitir la expresividad del texto. Los cambios de ritmo en las cuatro partes que conforman el aria muestran la versatilidad de la composición de Strozzi para poder ilustrar los distintos sentimientos que plasma el texto. 

Siguen en el programa ‘Mi fa rider la speranza’ y el lamento ‘Lagrime mie’ de Diporti di Euterpe (1659), un compendio de cantatas con texto de Pietro Dolfino. La primera es de carácter alegre y, de nuevo, tenemos constantes cambios de tempi que Baráth afronta muy bien, cantando con un tono brillante y buenas agilidades. La segunda es más recitada y permite a la cantante mostrar sus dotes de intérprete del texto. La belleza del timbre de Baráth y su dominio del estilo ilustra cómo Strozzi le daba importancia y lucimiento a la voz en sus piezas cantadas.

Otra de las arias importantes de Strozzi que aparecen en este disco es el lamento ‘Sul rodano severo’, que habla de la trágica muerte del favorito del rey Luis XIII, el Marqués Cinq-Mars, Henri Coiffier de Ruzé, quien fue ejecutado en 1642 por ser el líder de una conspiración en contra del Cardenal Richelieu. Esta pieza depende mucho de la intención narrativa y de la emotividad con que se enuncie el texto. No es, de ninguna manera, un aria de virtuosismo vocal. 

En ‘Chi brama in amore’ de Amante Loquace, de 1657, una “ariette a voce sola escrita” de carácter jovial y pícaro, la voz de Baráth puede volar un poco más. La sexta y última pieza de Strozzi es el aria ‘Voglio sí, vo’cantar… Misero, i guai m’han da me astratto’ de la cantata L’astratto Op. 8, compuesta en 1664.

Para el lucimiento de Il Pomo d’Oro, además de para ilustrar el genio como compositor de Cavalli, se incluyen cinco piezas de Statira, Principessa di Persia, escrita en 1656: la Sinfonia, las arias ‘Alba, ch’imperli i fiori… Amor, che mascherasti’, ‘Cresce il fuoco, avvampa il cuore’ y ‘Vanne intrepido, o mio bene’, además de la Canzon a 3 de su Musiche sacre.

Los otros compositores que vienen representados en el disco son Biagio Marini, con la Sinfonía grave La Zorzi, Affetti musicali Op. 1 (1617) y la Sonata sopra ‘Fuggi, dolente core’ (1655), bellamente interpretadas por Il Pomo d’Oro. De Antonio Cesti, Baráth canta ‘Speranza ingannatrice’. Y de Tarquinio Merula, interpreta las Canzoni overo sonate concertante per chiesa e camera, Libro 3 Op. 12: XIX: Ballo detto Eccardo (con Francesco Corti en el clavecín, quien también dirige al ensamble). Gran mención merece Il Pomo d’Oro y Corti en su delicada y bien ejecutada interpretación de las piezas instrumentales. 

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