Il birraio di Preston en Pésaro

Agosto 25, 2023. Por segundo año consecutivo, se renovó la cita con el festival nacional “Il bel canto ritrovato”, nacido del tesón de quienes comparten la pasión y la esperanza de ver renovado un repertorio cada vez más rancio. Los dos superintendentes Rudolf Colm y Saul Salucci, junto con el director artístico Daniele Agiman, con la ayuda de un enjambre de personas apasionadas y diligentes, han creado un evento de gran interés. 

Después de la hazaña del año pasado con Cecchina suonatrice di ghironda (Cecchina la zanfonista) de Pietro Generali, la edición de 2023 se dedicó al redescubrimiento de Il birraio di Preston (La cervecería de Preston) de Luigi Ricci, en la versión editada por Damiano Cerutti. El compositor, nacido y formado en Nápoles, visitó muchas de las ciudades más importantes de Italia y logró importantes éxitos musicales. En cierto momento, debido a problemas económicos, se vio obligado a buscar un trabajo estable que encontró en Trieste, inicialmente como maestro de capilla y organista en San Giusto, luego también como concertino en el Teatro Grande. Durante treinta años de actividad creativa, Ricci compuso diversas partituras de éxito que permanecieron en las carteleras de los principales teatros nacionales e internacionales durante décadas. 

La que ofreció el festival de Las Marcas es una oportunidad imperdible: por fin se puede escuchar una obra hoy más conocida por haber dado título a una famosa novela de Andrea Camilleri. Il birraio di Preston se representó por primera vez el 5 de febrero de 1847 en el Teatro della Pergola de Florencia, con gran éxito, también en virtud de las características del estilo del autor: la sensibilidad y predisposición para el repertorio cómico donde se aprecia su estilo personal, su instinto teatral y su capacidad de escritura. La historia es uno de esos enredos tan queridos en el teatro de ópera de la primera mitad del siglo XIX. Una trama formada por desencuentros amorosos y giros en el trasfondo primero de la cervecería Preston, luego del ejército y el campo de batalla. 

El reparto reunido en Pésaro fue bastante homogéneo y variado: Gianni Giuga, que en el papel protagonista de Daniele Robinson hizo gala de un eficaz dominio del fraseo y de una fácil presencia escénica, dio excelentes pruebas de sus capacidades, e Inés Lorans, capaz de delinear con gracia y carácter a la apasionada Effy. Tanto el barítono Francesco Samuele Venuti, que interpretó con gusto el personaje de Tobias, como el tenor Antonio Garés que probó, con suficiente habilidad, el complejo papel de Oliviero Jenkins, actuaron con válida diligencia. El reparto lo completaron Aloisa Aisemberg, la exitosa Anna, Alessandro Abis, el persuasivo Lord Murgrave, Nicola Di Filippo, Lovel, y Simone Nicoletto, Bob. 

Al frente de la correcta Orquesta Sinfónica Rossini estuvo el director artístico del festival, Daniele Agiman, capaz de llevar las riendas de la narrativa con propiedad y atención a las necesidades de los solistas. También fue exitosa la contribución del Coro del Teatro della Fortuna, dirigido por Mirca Rosciani. La dirección de Daniele Piscopo resultó sencilla y de fácil lectura, como corresponde a una ópera prima en los tiempos modernos. Fue buena la idea de involucrar a los alumnos del Liceo Artístico Mengaroni en la creación de escenografías digitales que fueran funcionales al espectáculo.