Anna Bolena en Buenos Aires

Aspecto de Anna Bolena en versión concierto con movimiento escénico en el Teatro Colón © Arnaldo Colombaroli

Junio 23, 2023. Luego de 53 años y por segunda vez en su historia el Teatro Colón ofreció Anna Bolena de Gaetano Donizetti, con un elenco de verdadera relevancia internacional que no defraudó y con una versión visual que resultó interesante: a medio camino entre el concierto —como se había anunciado originalmente— y la puesta en escena.

Con muy pocos elementos se logró que en el escenario cobrara vida la trama. La idea de Gabriel Caputo consistió en unas estructuras colgantes y seis plataformas de distintas alturas iluminadas en el piso para los cantantes solistas. En el fondo del escenario el ciclorama con los extraordinarios climas lumínicos aportados por Rubén Conde y por delante el Coro en sus asientos. 

Con los parcos, pero absolutamente necesarios, movimientos teatrales y con las distintas ubicaciones de los solistas creados por Marina Mora, se logró dar marco a cada una de las escenas y crear los climas propicios para este gran drama. El vestuario no fue histórico sino negro, actual y algunos casos el típico de un concierto y fue elegido, según el programa de mano, por Mercedes Nastri.

El maestro Iñaki Encina Oyón logró una muy prolija versión orquestal que fue creciendo en el curso de la representación.

Como Anna Bolena se contó con la soprano rusa Olga Peretyatko que, a su exquisita presencia escénica, sumó una depurada línea de canto, perfecto estilo, gradaciones y sutilezas por doquier, agilidades perfectas y el adecuado dramatismo que exige la parte.

La mezzosoprano italiana Daniela Barcellona aportó su descollante caudal sonoro a su Giovanna Seymour. En el inicio se notó contenida y con alguna irregularidad, pero fue creciendo a medida que avanzó la representación, insuflando en todo momento vida a su personaje con perfecto estilo y avasallante personalidad.

El papel de Enrico está escrito para un cantante que posea gran fuerza y tenga especiales dotes actorales. No cuenta con un aria, pero sus intervenciones son variadas y de gran lucimiento. El bajo-barítono italiano Alex Esposito deslumbró en todo momento por su bello color vocal, amplio registro, caudal sonoro y expresividad. Un debut en el Colón para recordar.

El tenor español Xabier Anduaga encaró a su Percy con un registro parejo, coloraturas perfectas, agudo seguro y nítido, fraseo convincente y bello color vocal. Una noche de gran triunfo para el joven artista vasco.

La mezzo argentina Florencia Machado no desentonó dentro de un elenco absolutamente de primera clase internacional con un consumado Smeton. Con digna corrección completaron el elenco tanto el bajo argentino Christian de Marco (Lord Rochefort) como el tenor uruguayo Santiago Vidal en el breve rol de Hervey. El Coro Estable del Teatro, dirigido como es habitual por Miguel Martínez, cumplió con su solvencia habitual su cometido.

Compartir: