?? La Gran Misa en Marsella
[cmsmasters_row data_color=»default» data_bot_style=»default» data_top_style=»default» data_padding_right=»5″ data_padding_left=»5″ data_width=»fullwidth»][cmsmasters_column data_width=»1/1″][cmsmasters_text]
Diciembre 1, 2019. La espectacular Iglesia de Notre-Dame du Mont de Marsella ha sido el escenario del estreno en Europa de la última parte de la Gran Misa del compositor y director argentino Martin Palmeri. El estreno mundial de dicha obra había tenido lugar en Carnegie Hall, Nueva York, en junio de 2019 ante una gran expectación. Su estreno en Francia ha sido un éxito rotundo y consolida a Palmeri como uno de los mejores compositores de música religiosa del siglo XXI.
La primera parte del programa incluyó la Misatango o Misa de Buenos Aires, una obra en latín creada hace 23 años y que sigue los parámetros de las misas clásicas. En esta ocasión, la pieza argentina fue interpretada por la mezzosoprano Christine Tumbarello y Les Choeurs de Provence, un elenco de voces que brilló a gran nivel. Los Coros de Provenza es una importante agrupación integrada por 66 coristas de dicha región al sur de Francia, fue creada en 1980 por Alain Chouvet y desde 2008 la dirige Gallian Ressort. El maestro dirigió con mucho oficio a la Orquesta Philéor, logrando momentos de gran intensidad en los pasajes corales. Como solistas instrumentales debemos destacar a la pianista Sabine Pizzicoli y a Yvonne Hahn, quien nos transportó por momentos al Río de la Plata con su bandoneón.
En la segunda parte del programa, tenemos que destacar la presencia de la joven soprano francesa Jennifer Michel, la gran triunfadora en el estreno europeo de la Gran Misa de Palmeri, todo un acontecimiento para la ciudad de Marsella. Los otros solistas fueron: la mezzo Christine Tumbarello, el tenor Juan Antonio Nogueira y el barítono Daniel Marinelli.
La Gran Misa colgó el cartel de “no hay boletos”, y fue un rotundo éxito que fue evidenciado por los varios minutos de aplausos que el público ofreció a los protagonistas. Una pieza clásica de este nivel ha podido ser apreciada en toda su dimensión gracias a la perfecta armonía vocal entre los cuatro solistas y el Coro de Provence en un marco incomparable como es la Iglesia Notre-Dame du Mont de Marsella.
La mezzo Tumbarello, gran protagonista de la primera parte del programa —la Misatango de Palmeri— y única solista, nos deleitó con una voz bella, muy elegante y homogénea. En la Gran Misa, su instrumentos se mezcló a la perfección con el de la soprano en el dúo ‘Sanctus’, mostrando junto al resto de los solistas esa nota de complicidad vocal que consigue colores y matices de gran precisión.
El barítono Marinelli es, además de un cantante que destaca por su excelente técnica vocal, un gran músico con una amplia experiencia en este tipo de conciertos. Su interpretación en el dúo ‘Benedictus’ junto al tenor causó un gran impacto en el público asistente. El español Nogueira mostró esa voz cálida y potente que tanto gusta por tierras francesas. La elección de una voz latina de muchos decibelios para esta composición religiosa con tintes criollos ha sido todo un acierto, y la pieza ha gozado de una autenticidad y de un expresionismo que no se vieron en su estreno en Nueva York.
Michel, soprano solista y una de las cantantes más prometedoras de la lírica francesa, nos deleitó con su calidad interpretativa y una voz sólida en todo el registro; destacó además por su gran seguridad en las notas altas. Habrá que seguir de cerca a esta joven cantante que próximamente interpretará los roles de Nedda en la Ópera de Saint Etienne y Micaëla en la Ópera de Marsella, dos grandes retos que la soprano afronta con mucha ilusión.
[/cmsmasters_text][/cmsmasters_column][/cmsmasters_row]