Tosca en Novara
Mayo 28, 2022. Floria Tosca es sin duda uno de los personajes más conocidos y queridos por el público de todo el mundo y la música es de un italiano, nada menos que de Giacomo Puccini, con toda la sensible poesía y el lirismo que agrada. ¡Y el Teatro Coccia di Novara no ha perdido esta gran oportunidad!
Cuando se hace referencia a una ópera se suele decir de manera inapropiada, por ejemplo, Tosca de… y se menciona al director de escena. Pero antes que todo, Tosca es de Puccini y los libretistas Luigi Illica y Giuseppe Giacosa, y si en el teatro uno se emociona y participa con lo que sucede sobre el escenario, más allá del compositor, la orquesta y los cantantes, hay que darle mucho mérito al director de escena que, en el caso de esta puesta en escena fue Renato Bonajuto, quien ha optado por un diseño clásico con los elementos y detalles que aportan los diseños originales del montaje de la ópera, impregnando su dirección con elegancia y refinamiento, con la escenografía creada por Giovanni Gasparro y Danilo Coppola, por la distinción en los vestuarios de Artemisio Cabassi, por las suntuosas y espectaculares escenas, desde el primer acto en la Iglesia, y por los armoniosos movimientos que permitieron al espectador vivir y participar de la narración y actuación.
Fabrizio Maria Carminati fue el director experto y establecido que supo cómo concertar a la Orquesta Filarmónica Italiana en el foso, y lo hizo con claridad y participación. El Coro San Gregorio Magno estuvo, como siempre, a la altura, incluso el coro de niños, tan importante en Tosca, simplemente agradó. Los coros estuvieron dirigidos por Mauro Trombetta, y por Paolo Beretta y Alberto Veggiotti, respectivamente.
Las luces sabiamente concebidas por Ivan Pastrovicchio estuvieron “silenciosas”, pero atentas a los detalles, como en el segundo acto, cuando la luz penetraba por la ventana abierta por Scarpia a la galería de cuadros; o cuando en el tercer acto, la reja de la prisión también se reflejaba sobre la pared lateral.
Con respecto a las voces, Saverio Pugliese como Spoletta consiguió perfilar las características del personaje al igual que Graziano Dallavalle en el doble papel de Angelotti y el Carcelero, a los que dotó de un agradable y profundo tono. Stefano Marchisio fue un vivaz y genial Sacristán primero y luego Sciarrone, y su tarea la expresó con hermoso color y carga interpretativa.
El barítono Francesco Landolfi interpretó el papel de un Scarpia que no fue un personaje tan malo, sino generosamente astuto y lascivo, cantando con una voz tonalmente interesante. Por su parte, el tenor egipcio Ragàa Eldìn resultó ser un apasionado Cavaradossi, interpretado con una grata y conmovedora voz. Finalmente, dejamos al papel de Tosca que en el escenario del Coccia fue interpretada por la soprano Alessandra Adorno, quien mostró una voz brillante y al mismo tiempo rica en colores y matices, que hizo fluir con cualidad aterciopelada entre las arias, infundiéndole a la personalidad de Tosca pasión, dignidad, bondad, hasta su ineludible destino. Fue una placentera tarde de lirica en este teatro piamontés.