Marianne Crebassa: Séguedilles
Marianne Crebassa (mezzo), Stanislas de Barbeyrac (tenor), Adriana González (soprano), Victoire Bunel (mezzosoprano), Céline Laborie (soprano), Alphonse Cemin (piano), Thibaut Garcia (guitarra)
Orchestre et Choeur National du Capitole de Toulouse; Ben Glassberg (director)
ERATO CD
En su nuevo disco intitulado Séguedilles, la mezzosoprano francesa Marianne Crebassa presenta una selección de canciones, arias y duetos de óperas de compositores franceses que se inspiraron en España y compositores españoles que buscaron ideas musicales nuevas en Francia, tales como Georges Bizet, Jules Massenet, Manuel De Falla, Federico Mompou, Jacques Offenbach, Jesús Guridi, Maurice Ravel y Camille Saint-Saëns. Crebassa tiene raíces franco-españolas y explora y explota esta combinación de fuego, elegancia y vivacidad en las piezas que seleccionó para esta grabación.
Comienza el disco con la ya mítica “Habanera” de Carmen de Bizet, incluyendo el coro introductorio ‘Carmen, sur tes pas, nous nous pressons tous’. Crebassa acaricia cada frase con buen gusto, línea de canto y dicción impecable. Su timbre aterciopelado, con una calidez muy mediterránea, hacen de ella ideal para interpretar a la famosa gitana. Escuchamos a una Carmen joven, seductora, traviesa y muy segura de sus encantos. Incluye también la seguidilla ‘Près des remparts de Séville’, en donde la acompaña el tenor Stanislas de Barbeyrac como Don José, y ‘Les tringles des sistres tintaient’, en donde armonizan con ella Céline Laboire (Frasquita) y Victoire Bunel (Mércèdes).
Carmen, WD 31, Act I: «Près des remparts de Séville» (Carmen, Don José) – YouTube
Carmen es la primera de cinco personajes españoles femeninos de carácter seductor y fuerte que aparecen en el disco. Crebassa interpreta también a Dulcinée, Concepción, Périchole y Salud, con diferentes facetas de cómo se visualiza en la ópera a la mujer española.
Cada una de estas mujeres representan, desde el punto de vista vocal, estilos musicales muy variados pero las une un fuego e intensidad de sentimientos que son propiamente latinas. Pasamos de la fogosidad e ímpetu de Carmen a la melancolía de Salud en ‘Vivan los que ríen!’ de La vida breve de Manuel de Falla. Su dicción en español es muy buena y aquí luce su registro central oscuro y sus graves redondos. De Barbeyrac canta las frases de Paco con el Choeur National du Capitole de Toulouse, quienes crean una atmósfera de tristeza y añoranza como fondo al lamento de Salud.
Sigue un fragmento más alegre: la presentación de Dulcinée en el acto I de Don Quichotte de Massenet con el aria ‘Dulcinée!… Alza! Quand la femme a vingt ans’, acompañada también por el coro.
Le siguen cuatro de las seis canciones castellanas compuestas por el compositor vasco Jesús Guridi Bidaola (1886 – 1961), las cuales canta Crebassa acompañada al piano por Alphonse Cemin. Están inspiradas en canciones tradicionales recolectadas por Cesáreo Garda en 1936 y fueron estrenadas en 1939 en Bilbao. Inicia con la No.1, ‘Allá arriba, en aquella montaña’, con un acompañamiento atmosférico por parte del pianista, permitiendo a Crebassa cantar la letra con expresividad. Moldea bien su voz para evitar que estas canciones suenen como arias de ópera, con una emisión un poco más lisa en ciertos momentos, sin perder la brillantez en su timbre. Le sigue la canción No. 4, ‘No quiero tus avellanas’, pieza sencilla pero altamente emotiva. Continua con la No. 5, ‘Cómo quieres que adivine’, de carácter más alegre y con mucho sabor a canción pueblerina tradicional. Termina este ciclo de canciones de Guridi con la No. 6, ‘Mañanitas de San Juan’, con un estilo muy lírico, en donde Crebassa hace gala de un registro agudo bien timbrado y con squillo. Recuerda mucho su color de voz en los agudos al timbre de otra mezzosoprano de hace algunos años: la gran Frederica Von Stade.
Continuando con las canciones, toca el turno a una compuesta por Jules Massenet de título ‘Nuit d’Espagne, con texto de Louis Gallet, estrenada en 1871. El guitarrista Thibaut García acompaña magistralmente a Crebassa en esta canción con un claro sabor español. Del compositor catalán Frederic Mompou interpreta El combat del somni, una recopilación de cinco canciones basadas en poemas de Josep Janés: ‘Damunt de tu només les flors’, ‘Aquesta nit un mateix vent’, ‘Jo et pressentia com a mar, ‘Fes-me la vida transparent i’ y ‘Ara no sé si et veig, encar’. En ellas, Crebassa canta con una voz aterciopelada y clara. Resaltamos aquí la hermosa orquestación de estas canciones y la manera como Ben Glassberg hace que sus músicos maticen y coloren la textura musical de cada canción.
Con la soprano guatemalteca Adriana González canta el bolero para dos voces El desdichado de Camille Saint-Saëns, canción con un ritmo muy pegajoso y en donde ambas voces se acoplan de maravilla. Es, definitivamente, una de las canciones más hermosas del disco y un gran descubrimiento para todos aquellos quienes no la conocían. González tiene un timbre igual de cálido que el de Crebassa y se complementan muy bien en las armonías. La letra es de Jules Barbier, famoso por escribir libretos de ópera para muchos de los grandes compositores de ópera franceses del siglo XIX.
Otra canción de estilo español compuesta por un francés que aparece en el disco es ‘Chanson espagnole’ de Maurice Ravel, con Cemin de nuevo acompañando a Crebassa en el piano. Esta canción forma parte del ciclo Chants populaires M. A 17 de Ravel y está impregnada de sabor hispánico. Crebassa luce su registro grave y canta completamente en estilo gitano. Continua con la ‘Séguidille’ No.3 de Trois mélodies de Manuel de Falla con textos de Théophile Gautier.
Dejamos atrás las canciones tradicionales, los cantos melancólicos y de añoranza y pasamos a la opereta. Marianne Crebassa canta ahora la escena de Périchole y Piquillo ‘Le conquérant dit à la jeune indienne’ y la seguidilla ‘Vous a-t-on dit souvent’ del acto I de La périchole de Jacques Offenbach, nuevamente con el tenor Stanislas De Barbeyrac. Ambos cantantes entienden a la perfección la chispa y la picardía de la música de esta obra. Además de cantar con estilo más relajado, saben interpretar con sus voces el lado cómico de estas dos escenas. El virtuosismo vocal que pueden mostrar aquí es, especialmente, con un trabalenguas en ‘Vous a-t-on dit souvent’, con un tempo bastante rápido pero manteniendo siempre la dicción clara y el estilo.
La mezzosoprano francesa canta el aria de Concepción ‘Oh! La pitoyable aventure’ de la ópera (descrita también como comédie musicale) L’heure espagnole de Ravel. Podríamos decir que esta es una escena de carácter más dramático y Crebassa pone más peso en su voz para imprimir la exaltación del personaje. Maneja bien los contrastes de emociones y de matices musicales en esta fantástica pieza.
Excelente el trabajo orquestal de la Orchestre et Choeur National du Capitole de Toulouse bajo la batuta de Ben Glassberg. Moldea el sonido de sus músicos con gran maestría para abordar los diversos estilos de cada una de las obras que Marianne Crebassa canta en esta singular y vibrante selección de arias y canciones que muestran la importante y muy fructífera relación artística entre dos grandes naciones: Francia y España.