Amadè — Julie Fuchs
Julie Fuchs
Balthasar-Neumann-Orchestra
Thomas Hengelbrock
SONY CLASSICAL CD
El más reciente disco de la carismática soprano francesa Julie Fuchs es un homenaje a Wolfgang Amadeus Mozart, a través de un recorrido por varias de las arias más bellas que el compositor austriaco escribió para la voz de soprano. Cuando se le preguntó a Fuchs acerca del título del disco (Amadè), ella respondió: “‘Amadè’ es la firma que Mozart utilizaba para las cartas que enviaba a su familia, a su círculo más cercano; seguramente es el nombre de pila que algunas le han susurrado al oído. ‘Amadè’ es Mozart que firma con su nombre real, en francés, solo para mí.”
En este disco, Fuchs también hace homenaje a tres sopranos, tres voces muy importantes en la vida de Mozart y en los estrenos de varias de sus óperas: Anna Gottlieb, Nancy Storace y Caterina Cavalieri. De esta manera podemos descubrir en la actualidad cómo eran esas voces que inspiraron a Mozart o que estrenaron sus obras que ahora son icónicas en el repertorio operístico. Cada una de ellas tenía una voz con características distintas que Mozart descubría y, con base en sus mejores dotes líricas, componía ciertos roles o ciertas arias específicas.
Las 17 piezas que incluye el disco van desde arias de concierto hasta arias escritas para ciertas intérpretes específicas y también arias de óperas de Mozart no tan conocidas. Comienza el disco con el aria de Barbarina ‘L’ho perduta, me meschina’, del acto IV de Le nozze di Figaro. La melodía es sencilla e ilustra la angustia del personaje por encontrar el alfiler que debe regresar al Conde y que ha perdido. Anna Gottlieb tenía 13 años cuando cantó este papel, así que Mozart le compuso un aria pequeña, sin dificultades, pero muy lucidora. Fuchs la canta con la ingenuidad y la voz casi infantil que debe tener Barbarina.
Le sigue el andantino del ballet Les petits riens (Las pequeñas naderías) K.299b, interpretado con un sonido puro por la Balthasar-Neumann-Orchestra bajo la dirección de Thomas Hengelbrock. Este ballet en un acto y tres cuadros de Jean-Georges Noverre, con música Mozart, se interpretó por primera vez en la Académie Royale de Music en París, el 11 de junio de 1778.
Sigue el aria de Pamina ‘Ach, ich fühls’ de Die Zauberflöte K.620, rol que estrenó también Anna Gottlieb y que, como el aria de Barbarina, hace que el registro central y la expresividad de la soprano luzcan al máximo. Fuchs ya ha cantado el rol y se nota a gusto con el aria. Su timbre le da la candidez necesaria al papel de Pamina. La orquesta interpreta después el V. Allegro vivace assai de Thamos, König in Ägypten K.345 con un sonido brillante y un tempo vibrante; continúa luego Fuchs con ‘Tiger, wetze nur die Klauen’ de Zaide (Das Serail) K.344, aria que va de acuerdo con el ritmo intenso y acelerado de la pieza instrumental que la precede. Esta es un aria de bravura que exige a la cantante interpretar con furia el texto que canta, sin perder la belleza vocal. Fuchs la canta con aplomo, excelente dicción en alemán e imprimiéndole la intensidad necesaria. Fabuloso el pulso que enfatiza la fuerza de la escena con el tempo de Hengelbrock, para después contrastarlo con la parte B del aria, en un tempo más lento.
Zaide (Das Serail), K. 344: ‘Tiger, wetze nur die Klauen’
Siguiendo con el tema de los serrallos, Fuchs canta el aria de Konstanze ‘Ach ich liebte, war so glücklich!’ de Die Entführung aus dem Serail K.384, ópera que estrenó Caterina Cavalieri en 1782. Este es otro papel que le va como anillo al dedo a Fuchs vocalmente, mostrando todas sus maravillosas cualidades canoras. El registro agudo y sobreagudo no es un problema para la soprano francesa que canta el aria con soltura, hermosa línea de canto y agilidades claras y certeras además de staccati limpios. Fuchs sale triunfante de este tour-de-force.
Die Entführung aus dem Serail, K. 384, Acto 1: ‘Ach ich liebte, war so glücklich!’
La orquesta toca la Contradanza en Sol Mayor ‘Les filles malicieuses’, K. 610 (Edición Beriso), pieza juguetona en la que participa el pianoforte como instrumento solista, interpretado aquí por Andreas Küppers. Susanna en Le nozze di Figaro K. 492 es un papel que Fuchs cantó recientemente en el Festival de Aix-en-Provence, y aquí la podemos escuchar cantando la hermosa aria del acto IV ‘Giunse alfin il momento… Deh, vieni non tardar’. Aquí debemos recordar a Nancy Storace, quien fue la primera Susanna en el estreno de dicha ópera. Hengelbrock elige un tempo un poco rápido para el recitativo, quizá queriendo mostrar la impaciencia de Susanna en ese momento; ya en el aria oímos un tempo más mesurado en donde Fuchs se regodea y disfruta cantando con una línea de canto exquisita.
Fuchs incluye también el aria de la Contessa Almaviva ‘E Susanna non vien!… Dove sono’, que Mozart le escribiera a la soprano Caterina Cavalieri para el estreno de Viena en 1789, alterando un poco la segunda parte del aria ‘Ah, se almen la mia costanza’. En esta versión hay un poco más de fiorituras, dándole un carácter más jovial a partir de la frase ya mencionada. Es muy refrescante escuchar a una condesa joven, con ese ímpetu que nos recuerda que esta mujer fue una vez la Rosina de El barbero de Sevilla, pero que ha ganado madurez y experiencia. Fuchs le da ese toque de fuerza y dignidad, de esperanza.
Le nozze di Figaro, K. 492, Acto 3: Recitativo: ‘E Susanna non vien!’ (Versión para Cavalieri)
Le nozze di Figaro, K. 492, Acto 3: Aria: ‘Dove sono i bei momenti’ (Versión para Cavalieri)
El disco incluye un aria de concierto de la Cantata Per la ricuperata salute di Ofelia, K. 477ª, ‘Quell’agnelletto candido’ (Arreglo de Beriso), pieza que dura menos de dos minutos y que Fuchs canta con ligereza, actitud juguetona y voz cristalina.
La Scena con rondo, K. 505: ‘Ch’io mi scordi di te?’… ‘Non temer, amato bene’ fue escrita por Mozart para Nancy Storace en 1786. Es muy “operística” en su estructura y muy expresiva. Fuchs hace el recitativo más introspectivo, menos intenso para ya luego entrar al aria con melancolía y añoranza. Esta interpretación se siente más íntima, menos explosiva pero no por ella menos sentida. Su fraseo es elegante y sin artificios, es un canto puro y honesto.
Scena con rondo, K. 505: Recitativo Ch’io mi scordi di te? – YouTube
Scena con rondo, K. 505: Aria Non temer, amato bene – YouTube
Del oratorio Davide Penitente K.469 Fuchs canta ‘Fra l’oscure, ombre funeste, Et incarnatus est’. Esta aria también se la escribió Mozart a la Cavalieri; es un aria con cambios de tempo, muy bien balanceados por la experta mano de Hengelbrock. La Balthasar-Neumann-Orchestra toca pintando los colores orquestales con gran maestría y matizando refinadamente. La soprano francesa vuelve a mostrar su calidad vocal y su manera de expresar sentimientos con las agilidades.
Después, la orquesta interpreta el Canon en Fa menor, K. 557: ‘Nascoso è il mio sol’ (Arreglo de Beriso), para cuatro voces a capella, escrito en 1788. En este caso lo tocan las secciones de instrumentos de viento. Cierra el disco con Fuchs cantando ‘Das Lied der Trennung’ (La canción de la separación), K519; Andreas Küppers la acompaña al piano en esta última canción. Magnífica interpretación, con ambos artistas muy compenetrados en mostrar la desesperación del adiós que esta canción evoca. Exquisita interpretación de Fuchs, llena de matices y sutilezas vocales.
Video oficial: ‘Das Lied der Trennung’, K. 519
Fantástico trabajo Thomas Hengelbrock al frente de la Balthasar-Neumann-Orchestra, con ese sonido lleno de colores y matices, tocando con el estilo que las piezas requieren. Un fabuloso disco en donde Julie Fuchs nos lleva a recorrer varias arias de concierto, canciones y arias de óperas de Mozart, con una visión más cercana y más íntimas del gran Amadè.