Randall Scotting — The Crown

The Crown
Heroic Arias for Senesino
Randall Scotting (contratenor)
Orchestra of the Age of Enlightenment
Laurence Cummings
Signum Classic, 2022

Grabado en Londres durante el mes de octubre del año pasado, The Crown es el álbum con el que debuta como solista el joven contratenor norteamericano Randall Scotting, uno de los artistas más emocionantes en el actual panorama operístico mundial (cuya entrevista sobre su carrera fue publicada en Pro Ópera en julio de 2021: https://proopera.org.mx/entrevista/randall-scotting/). 

Sus presentaciones más recientes han sido en el Metropolitan Opera (Agrippina de Händel y Euridice de Aucoin) la Royal Opera House de Londres (Death in Venice de Britten), la Bayerische Staatsoper de Múnich (Thomas de Haas) y el Théatre Des Champs-Elysées de París (Xerxes de Händel), con gran éxito.

En esta hermosa grabación, Randall exhibe todas esas virtudes elogiadas por el público y la crítica: una voz de impresionante belleza, cálida, capaz de emocionar gracias a su control técnico y dominio de las emociones en los roles encarnados, así como una musicalidad sólida que le permite afrontar exitosamente los pasajes floridos y coloratura de extrema dificultad. El ensamble musical elegido para el álbum es la Orquesta Age Of The Enlightenment, bajo la dirección de Laurence Cummings, maestro británico especialista en el periodo musical barroco. Cada aria en este registro fue concebida para algún personaje real (por ello la elección del título), como algún rey, héroe noble o valiente conquistador. 

El disco se encuentra dominado por las creaciones de siete compositores barrocos inspirados por el talento y sensibilidad del célebre castrado Francesco Bernardi “Senesino”, quien durante quince temporadas fue el protagonista de las óperas de Händel en Londres y logró conquistar la imaginación de muchos otros compositores, algunos de ellos actualmente olvidados.

El luminoso timbre de Randall se hace presente desde la primera aria ‘Ricordati che offesa’ (Recuerda qué ofensa) de la ópera Eumene (Turín, 1737) de Giovanni Antonio Giaj, a la que sigue la triste escena ‘Lasso! Ch’io t’ho perduta’ (Infeliz, que te he perdido) de Vespasiano (Londres, 1724) de Attilio Ariosti, interpretada con una sublime línea vocal. Ariosti, por cierto, fue monje antes de dedicarse a la música y trabajó un tiempo para la Royal Academy londinense muy cerca de Händel y Bononcini.

‘Lasso! Ch’io t’ho perduta’, de Vespasiano (1724) de Attilio Ariosti

De la ópera Olimpiade (Florencia, 1737) compuesta por Giuseppe Maria Orlandini, se incluye el festivo pasaje ‘Se cerca, se dice’ (Si lo intenta, si dice) para continuar con una espléndida página orquestal titulada March of The Dead (Marcha de los muertos) de la obra Coriolano, también de Ariosti, así como el aria ‘So che guarda’ (Sé que parece) del personaje Caio Marzio Coriolano en que el clavecín, arpa y cello acompañan bellamente al cantante.

‘Se cerca, se dice’, de Olimpiade (1737), Giuseppe Maria Orlandini

El recitativo y aria de Ottone ‘Adelaide, a te vengo… Vedrò più liete è belle’ (Adelaide, vengo a ti… Te veré más feliz y hermosa) de la ópera Adelaide (Venecia, 1729) constituye una interpretación de bravura en que Scotting muestra su excitante coloratura en los frecuentes trinos. El canto virtuoso del contratenor encuentra su más sublime exhibición en ‘Non disperi, peregrino’ (No desesperes, peregrino) de la misma ópera, con radiantes notas picadas. Su fraseo es exquisito.

Randall y Senesino © Joel Benjamin

Para Nápoles en 1739, el boloñés Giovanni Alberto Ristori aportó su creación Adriano en Siria, cuya aria de Farnaspes: ‘Son sventurato’ (Soy desafortunado), exhibe un canto exultante y seguro por parte del contratenor que muestra un sonido libre, fresco y etéreo.

El aria de Gualtiero ‘Dolce sogno’ (Dulce sueño) de la ópera Griselda (Londres, 1722) de Giovanni Battista Bononcini es un pasaje en que la voz de Randall es guiada por la flauta y cuerdas en complicidad. La segunda aria de esta misma ópera, ‘Affetto, gioia’ (Cariño, alegría), insiste en la ornamentación y cuidada línea canora. La carrera de Bononcini se manifestó intensamente en muchas ciudades importantes de Europa, teniendo una relación fructífera con la Royal Academy ya citada. Sin embargo, la rivalidad de las célebres divas Faustina Bordoni y Francesca Cuzzoni y la contienda entre los simpatizantes de ambas cantantes durante la última función de su ópera Astianatte (cuyo texto está basado en Andrómaca de Racine) en 1726, precipitaron el fin de su carrera operística en Londres.

De Geminiano Giacomelli se incluye el aria ‘Non so frenar il pianto’ de la ópera Demetrio (Turín, 1736), plena de sutilezas y fraseo sublime. Y del maestro veneciano Antonio Lotti, el contratenor cierra el álbum con la extensa aria ‘Non può quest’alma in sen’ (No puede esta alma en el seno) de la ópera Ascanio (Dresde, 1718). Aquí se pone de manifiesto el dramatismo que colorea de forma natural el canto de Randall, pues cada frase e inflexión resultan sumamente expresivas. La belleza vocal del contratenor permanece al servicio del drama, las notas agudas son bordadas con seguridad mientras que su sonido de contralto se alza puro y sincero, lejos de cualquier artificio

En resumen, un álbum barroco de sutil belleza en lo vocal e instrumental, con un repertorio prácticamente desconocido pero esencial para los admiradores de la ópera más antigua, libre de exageraciones e indispensable en el actual panorama artístico del orbe. 

‘Fra l’orror d’atra foresta’, de Eumene (1737), Giovanni Antonio Giaj

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