Così fan tutte en Bilbao

Enero 27, 2023. La propuesta mozartiana de la temporada por parte de la Asociación Bilbaína de Amigos de la Ópera ha recaído en un colorido Così fan tutte que ha supuesto la consagración de dos cantantes de la tierra: la soprano Vanessa Goikoetxea y el tenor Xabier Anduaga.

En el recuerdo, la maravillosa producción de Patrice Chéreau en el Theater an der Wien, con una joven Elīna Garanča en el rol de Dorabella y un Don Alfonso de ensueño de la mano del gran Ruggero Raimondi. Históricas funciones en Viena con motivo del 250 Aniversario del nacimiento de Mozart.

La producción de la ABAO, estrenada el pasado sábado 21 de enero, lleva la firma de la directora de escena Marta Eguilior. La directora bilbaína ofreció una particular interpretación del libreto de Da Ponte, situando la acción en una “Belle Époque” donde impera el ilusionismo, lo mágico y lo esotérico. Apoyada en el vestuario de Belixte Saitua —mejorable en mi opinión, en lo referente a los dos jóvenes enamorados—, la puesta en escena careció en ciertos momentos de dinamismo (un escenario ondulado y lleno de obstáculos termina limitando la capacidad de movimiento de los protagonistas) y apenas ayudó al desarrollo de la trama. Por otro lado, debemos destacar la original idea de contar con un enano como ayudante del falso adivino Don Alfonso, papel mudo interpretado convincentemente por el actor Rubén Jiménez Rosco.

La escenografía fue también responsabilidad de Eguilior, que además colaboró en la magnífica iluminación junto a David Alcorta. Una carpa de feria sobre un escenario mitad bosque-mitad tablero de ajedrez, una cabina para adivinar el futuro, los dedos de una enorme mano y gigantescas cartas de Tarot, son los elementos destacables de un escenario enriquecido por las proyecciones audiovisuales de Iván Puñal. En este apartado, debemos destacar la brillante idea de presentar a los cantantes protagónicos mediante proyecciones durante la obertura del dramma giocoso. 

La dirección musical corrió a cargo de Oliver Díaz. Fiel a la partitura del genio de Salzburgo, destacó su gran control sobre los músicos y un meritorio acompañamiento de los cantantes, aunque echamos en falta algo de pasión y dinamismo en algunos momentos de la representación, en los que se decantó por tempi demasiado lentos. Gracias a su labor desde el foso, la Euskadiko Orkestra logró en algunos pasajes el sonido típicamente mozartiano, pese a que se desenvuelve mejor en otros repertorios. El Coro de la Ópera de Bilbao, magníficamente dirigido por Boris Dujin, realizó una labor oculta, sin salir a escena en ningún momento.

La soprano vizcaína Itziar de Unda, rostro habitual desde hace años en las temporadas de ABAO, fue una Despina convincente, tanto en su faceta cómica como en lo puramente canoro, destacando su interpretación del aria ‘Una donna a quindici anni’ sobre un columpio a gran altura, al iniciar el segundo acto.

El personaje de Don Alfonso recayó en el barítono romano Pietro Spagnoli, un artista de enorme categoría que ha perdido calidad vocal con el paso de los años. Imponente en lo teatral, brilló especialmente en los recitativos y en el terceto ‘Soave sia il vento’ junto a Dorabella y Fiordiligi. 

El barítono asturiano David Menéndez encarnó el personaje de Guglielmo, el enamorado de Fiordiligi. A nivel vocal, realizó una actuación de menos a más, ofreciendo un segundo acto más solvente y con mayor proyección de la voz. Como momentos destacados: el dúo con Dorabella ‘Il core vi dono’, y su aria ‘Donne mie la fate a tanti’, donde apreciamos una voz mucho más asentada.

La mezzosoprano italiana Serena Malfi debutó en Bilbao con gran éxito, ofreciendo una Dorabella contundente en lo vocal y muy convincente en su faceta de actriz. Desde el dúo inicial con Fiordiligi ‘Ah, guarda sorella’, apreciamos una voz de potencia considerable que maravilló en el quinteto ‘Sento, oh Dio, che questo piede’. En el segundo acto, siguió brillando a gran altura en los duetos y números grupales, luciéndose en el aria ‘È amore un ladroncello’, donde mostró un dominio amplio del registro.

En el día en el que el gran Wolfgang Amadeus Mozart cumpliría años, el tenor guipuzcoano Xabier Anduaga exhibió su potente instrumento vocal, bordando el rol de Ferrando. Impecable en el primer acto, que coronó con la archiconocida ‘Un aura amorosa’, entusiasmó en los dúos con el barítono y la soprano tras la pausa. Cantante dotado de un bello timbre y de un fiato extraordinario, exhibió una magnífica línea de canto durante toda la noche. Para enmarcar, la cavatina ‘Tradito schernito’, muy aplaudida por el público asistente. Habrá que escuchar a este joven tenor donostiarra el próximo mes de mayo en Las Palmas de Gran Canaria, donde su Edgardo, en las funciones programadas de “Lucía di Lammermoor”, puede marcar un antes y un después en la brillante carrera del mejor cantante que ha dado el País Vasco en décadas.

Teníamos muchas ganas de volver a escuchar a la soprano Vanessa Goikoetxea, tras su apoteósico triunfo como Mimì en La bohème de Puccini de 2018. Durante toda la representación, la cantante vizcaína ofreció una Fiordiligi de muchos quilates, mostrando una voz bien proyectada y agudos seguros y poderosos. Su aria del primer acto ‘Come scoglio’, muy aplaudida por el público, fue uno de los momentos estelares de una noche en la que impresionó en todos los dúos con la mezzo Serena Malfi. En el segundo acto, estuvo sublime en ‘Per pietà, ben mio, perdona’, toda una exhibición de musicalidad y técnica vocal. Para el recuerdo, el dúo con Anduaga ‘Fra gli amplessi’, donde mostró que está en un gran momento vocal. Al salir a saludar cuando finalizó la representación, fue la cantante más aplaudida: por algo es la nueva Reina de Bilbao. 

¡Feliz cumpleaños Wolfgang Amadeus Mozart!