Anuncian programación del Donizetti Opera Festival 2024 en Bérgamo

Escena de la producción de Zoraida di Granata en el Festival de Wexford, que se presentará en 2024 en Bérgamo © Clive Barda

Noviembre 21, 2023. A pesar de tener tan solo una década de historia, el Donizetti Opera Festival se ha posicionado a lo largo de este tiempo como uno de los más importantes de Italia por diferentes motivos. 

Un tanto por el programa #Donizetti200, el cual consiste en producir un título donizettiano estrenado exactamente 200 años antes. Muchos de esos títulos la última vez que se pusieron en un teatro fue hace dos siglos, convirtiendo este ciclo de estrenos mundiales en época contemporánea algo muy atractivo para los melómanos norditalianos. Otro punto de interés del festival es el mix de artistas que invitan a sus producciones, desde consagrados cantantes internacionales hasta estudiantes de la “Bottega Donizetti” (su opera studio), pasando por cantantes locales italianos, todos de excelente calidad. Pero definitivamente su mayor punto de fuerza es la gran aceptación del público mayormente bergamasco que anualmente agota las entradas para las funciones belcantistas.

El director artístico del DOF, Francesco Micheli, abraza una estatua de Gaetano Donizetti © Gianfranco Rota

En el marco de la edición 2023 con Il diluvio universale, Lucie de Lammermoor y Alfredo il grande, los directivos de la Fondazione Donizetti, junto a Francesco Micheli, director artístico, y Riccardo Frizza, director musical del festival, revelaron con un año de anticipación los títulos que se representarán en Bérgamo, “Ciudad de Gaetano Donizetti”, del próximo 15 de noviembre al 1 de diciembre del 2024.

La décima edición del festival se inaugurará en el Teatro Donizetti con una de las grandes obras maestras de la ópera seria: Roberto Devereux, ópera trágica con libreto de Salvatore Cammarano en la edición crítica de Julia Lockhart para la edición nacional de Casa Ricordi con la colaboración del Ayuntamiento de Bérgamo. Por su parte, Paolo Fabbri, director del Departamento Científico del Donizetti Opera Festival señaló que esta versión de Roberto Devereux de 1837 es la última etapa de la saga negra que Donizetti dedicó a lo largo de los años a la dinastía Tudor (aunque nada revela de su tragedia personal: la muerte prematura de su esposa, en julio de 1837, en plena fase de composición). Más bien, encontramos experimentos dramatúrgicos y formales que continuaron sus viajes creativos con aún mayor sutileza y fuerza expresiva.

El telón del histórico Teatro Sociale en la Bérgamo Alta se alzará para el ciclo #Donizetti200 con Zoraida di Granata, un melodrama heroico con libreto de Bartolomeo Merelli y Jacopo Ferretti en la edición crítica de Edoardo Cavalli. Zoraida… conmemorará el bicentenario de su debut en el Teatro Argentina de Roma en 1824. En realidad, se trata de su segunda versión, ya que el verdadero estreno se realizó en 1822 con bastante éxito, aunque a Stendhal, que estaba en Roma en ese momento, no le gustó nada la ópera: su corazón latía solo por Rossini y, de hecho, ni siquiera le gustaba Donizetti como persona. Gaetano retomó el título en 1824 y tomó medidas para adaptarlo a la nueva compañía de canto, que es justo la versión que se presentará en el Donizetti Festival del próximo año.

Riccardo Frizza, director musical del DOF © Simone Falcetta

Por último, de vuelta en el Teatro Donizetti, una de las óperas más famosas del compositor bergamasco, un título de su etapa compositiva madura: Don Pasquale. Un dramma buffo de Giovanni Ruffini y el mismo Donizetti que será presentado en la nueva edición crítica de Roger Parker y Gabriele Dotto para la edición nacional de Casa Ricordi. Donizetti había escrito óperas cómicas según la tradición, e incluso las había sazonado con un toque de sentimentalismo. Don Pasquale va más allá, hacia una comedia de cámara cuyo protagonista roza por momentos la caricatura. Durante siglos se había reído de los amores de un anciano por una joven: Ruffini y Donizetti preferían sonreír con melancolía, también porque el compositor —como sabemos por su biografía— sonreía a sí mismo.

Fabbri reflexionó también que, como L’elisir… o Lucia…, Don Pasquale nunca ha dejado de ser representado desde 1843 por ser una obra maestra de la última temporada creativa de Donizetti. En aquella época no había tantos títulos bufos; de hecho, era precisamente el género de la ópera cómica el que estaba en crisis. Bellini, por ejemplo, no escribió ninguna verdadera ópera cómica y Verdi compuso solo una al inicio de su carrera, Un giorno di regno, en 1840, y una al final, Falstaff, en 1893. 

¿Se había vuelto serio el público de mediados del siglo XIX? ¿habían entendido que les esperaban tiempos en los que había poco de qué reírse?, ¿disfrutaban más derramar lágrimas que reírse? Cualquiera que sea la respuesta, el Donizetti Opera Festival ha preparado un destacado y propositivo programa para el décimo aniversario del evento internacional dedicado al compositor bergamasco que naturalmente Pro Ópera cubrirá oportunamente.

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